Embarazo y Maternidad

Aunque el embarazo comienza con la implantación, el proceso que lleva al embarazo se realiza antes como el resultado de la fusión del gameto femenino, u ovocito, con el gameto masculino, espermatozoide. En la medicina este proceso se conoce como la fertilización, en términos simples, que es más comúnmente conocido como “concepción”. Después de la fecundación, el producto fundido del gameto femenino y masculino se refiere como un cigoto o huevo fertilizado. La fusión de los gametos masculino y femenino por lo general se produce después de la relación sexual, lo que lleva al embarazo espontáneo. Sin embargo, el advenimiento de la inseminación artificial y la fecundación in vitro han hecho posible lograr el embarazo sin tener relaciones sexuales. Este enfoque puede llevarse a cabo como una decisión voluntaria o debida a la infertilidad.

El proceso de fecundación se produce en varias etapas, y la interrupción de cualquiera de ellas puede llevar al fracaso. A través de la fecundación, el huevo se activa para comenzar su proceso de desarrollo, y los núcleos haploides de los dos gametos se unen para formar el genoma de un organismo diploide nuevo.

Al comienzo del proceso, el esperma sufre una serie de cambios, como esperma recién eyaculado es incapaz o poco capaz de fertilizar. Los espermatozoides deben someterse a la capacitación en el tracto reproductivo de la mujer durante varias horas, lo que aumenta su movilidad y desestabiliza la membrana, preparándolo para la reacción acrosómica, la penetración enzimática de la dura membrana del huevo. El esperma y el óvulo, que ha sido liberado de uno de los dos ovarios de la mujer, se unen en una de las dos trompas de Falopio. El óvulo fecundado, conocido como un cigoto, luego se mueve hacia el útero, un viaje que puede durar hasta una semana para completarse. La división celular comienza aproximadamente 24 a 36 horas después que las células masculinas y femeninas se unen. La división celular continúa a un ritmo rápido y las células entonces se desarrollan en lo que se conoce como un blastocisto. Cuando el blastocisto llega al útero se une a la pared uterina, un proceso conocido como implantación.

La masa de células, ahora conocida como un embrión, comienza la etapa embrionaria que continúa hasta que la diferenciación celular es casi completa a las ocho semanas. Estructuras importantes para el apoyo del desarrollo embrionario, incluyen la placenta y el cordón umbilical. Durante este tiempo, las células comienzan a diferenciarse en los varios sistemas del cuerpo. Los lineamientos básicos del órgano, el cuerpo y el sistema nervioso están establecidos. Al final de la etapa embrionaria, los comienzos de características tales como dedos, los ojos, la boca y las orejas se hacen visibles.

Una vez que la diferenciación celular es casi completo, el embrión entra en la etapa final y se conoce como un feto. Los primeros sistemas del cuerpo y de las estructuras que se establecieron en la etapa embrionaria seguir desarrollándose.

Los órganos sexuales comienzan a aparecer durante el tercer mes de gestación. El feto sigue creciendo, tanto en peso como en longitud, aunque la mayor parte del crecimiento físico ocurre en las últimas semanas de embarazo.

Duración

Los medicos nombrar tres diferentes fechas como el inicio del embarazo:

  1. El primer día de la pasada menstruación normal de la mujer,
  2. El fecha de la concepción (alrededor de dos semanas antes de su próximo período menstrual esperado), y
  3. El fecha de implantación (aproximadamente una semana después de la concepción).

Puesto que éstos se extienden sobre un período significativo de tiempo, la duración del embarazo necesariamente depende de la fecha seleccionado como el punto de partida elegido.

El sistema más común utilizado entre los profesionales de la salud es la regla Naegele, que se desarrolló en el siglo 19. Este calcula la fecha esperada desde el primer día del último período menstrual (LMP o LNMP) independientemente de los factores conocidos para hacer de esta fecha inexacta, una longitud de ciclo menstrual más corto o más largo. El embarazo suele durar más de 40 semanas de acuerdo con este método LNMP basada en el supuesto de que la mujer tiene una longitud predecible ciclo menstrual de cerca de 28 días y concibe el día 14 de ese ciclo, y un parto entre las 37 y 42 semanas se considera a término. Otros algoritmos más precisos, teniendo en cuenta una serie de variables, tales como si se trata del primer hijo o mas (es decir, la mujer embarazada es una primípara o multípara, respectivamente), etnia, edad de los padres, la duración del ciclo menstrual, y regularidad menstrual), pero estos raramente son utilizados por los profesionales de la salud.

Hay una desviación estándar de alrededor de 8-9 días con fechas de vencimiento calculados incluso los métodos más precisos. Esto significa que menos del 5 por ciento de los nacimientos ocurren en exactamente 40 semanas, el 50 por ciento de los nacimientos son una semana después de esta duración, y alrededor del 80 por ciento están dentro de 2 semanas. Es mucho más útil y preciso, por lo tanto, considerar un rango de fechas de vencimiento, en lugar de un día específico, con algunas calculadoras de fecha on line, debido que proporcionan esta información.

El embarazo es considerado “a término”, cuando alcanza la gestación 37 semanas completas, pero inferior a 42 (entre 259 y 294 días desde la FUM). Eventos antes de la terminación de 37 semanas (259 días) se consideran prematuros, desde la semana 42 (294 días) se consideran eventos postérmino. Cuando el embarazo supera las 42 semanas (294 días), el riesgo de complicaciones tanto para la mujer como para el feto aumenta de manera significativa. Por lo tanto, en un embarazo sin otras complicaciones, los obstetras prefieren generalmente inducir el parto en un momento fijado entre los 41 y 42 semanas.

El nacimiento antes de las 39 semanas, aunque considerado “a término”, aumenta el riesgo de complicaciones y muerte prematura, a partir de factores como los pulmones poco desarrollados, la infección por el subdesarrollo del sistema inmunológico, problemas de alimentación debidos al subdesarrollo del cerebro, y la ictericia por el subdesarrollo del hígado. Algunos hospitales en los Estados Unidos han observado un aumento significativo en los pacientes de unidades de cuidado intensivo neonatal cuando las mujeres programan los partos por conveniencia y están tomando medidas para reducir la inducción por razones no médicas. Las complicaciones de la cesárea son más comunes respecto a los nacimientos vivos espontàneos.

La fecha exacta del embarazo es importante, ya que se utiliza en el cálculo de los resultados de las diversas pruebas prenatales, (por ejemplo, en la prueba triple). Una decisión puede ser tomada para inducir el parto si el feto se percibe atrasado. Por otra parte, si LMP y la ecografía que data predecir diferentes respectivas fechas de vencimiento, siendo este último más tarde, esto podría significar el crecimiento fetal retardado y por lo tanto requieren más controles.

Parto

El parto es el proceso mediante el cual un bebé nace. Se considera el comienzo de la vida del bebé, y la edad se define en relación a este evento en la mayoría de las culturas.

Una mujer se considera que está en trabajo de parto cuando ella comienza a experimentar contracciones uterinas regulares, acompañados por los cambios de cuello uterino – principalmente borramiento y la dilatación. Mientras el parto es ampliamente experimentado como doloroso, algunas mujeres informan labores sin dolor, mientras que otras encuentran que la concentración en el parto ayuda a acelerar el trabajo y disminuir las sensaciones. La mayoría de los nacimientos son exitosos partos vaginales, pero a veces surgen complicaciones y una mujer puede someterse a una cesárea.

Durante el tiempo inmediatamente después del nacimiento, la madre y el bebé están unidos hormonalmente , la madre a través de la liberación de oxitocina, una hormona que también se libera durante la lactancia. Los estudios demuestran que la piel-con-piel entre la madre y su recién nacido inmediatamente después del parto es beneficioso tanto para la madre como para el bebé. Una revisión realizada por la Organización Mundial de la Salud encontró que la piel-con-piel entre las madres y sus bebés después del nacimiento reduce los llantos, mejora la interacción madre-hijo, y ayuda a las madres a amamantar con éxito. Ellos recomiendan que a los recién nacidos se permita un vínculo con la madre durante las primeras dos horas después del parto, el período que tienden a estar más alerta que en las horas siguientes de la vida temprana.

Período postnatal

El período postnatal comienza inmediatamente después del nacimiento de un niño y luego se extiende por cerca de seis semanas. Durante este período, el cuerpo de la madre comienza el retorno a las condiciones previas al embarazo que incluye cambios en los niveles hormonales y el tamaño del útero.

Diagnóstico del Embarazo

El comienzo del embarazo puede ser detectado en un número de diferentes maneras, ya sea por una mujer embarazada sin pruebas médicas, o mediante el uso de exámenes médicos con o sin la asistencia de un médico.

La mayoría de las mujeres embarazadas experimentan una serie de síntomas, lo que puede significar embarazo. Los síntomas pueden incluir náuseas y vómitos, cansancio excesivo y la fatiga, antojos de ciertos alimentos que normalmente no se buscaron y micción frecuente especialmente durante la noche.

Algunos de los primeros signos médicos están asociados con el embarazo. Estos signos suelen aparecer, en todo caso, dentro de las primeras semanas después de la concepción. Aunque no todos estos signos están siempre presentes, ni son todos ellos de diagnóstico por sí mismos, en su conjunto hacen un diagnóstico presuntivo de embarazo. Estos signos incluyen la presencia de gonadotropina coriónica humana (“hCG”) en la sangre y la orina, ausencia del periodo menstrual, sangrado de implantación que se produce en la implantación del embrión en el útero durante la tercera o cuarta semana después de la última menstruación, aumento de la temperatura basal del cuerpo que continua durante más de 2 semanas después de la ovulación, el signo de Chadwick (oscurecimiento del cuello del útero, vagina y vulva), signo de Goodell (ablandamiento de la porción vaginal del cuello del útero), el signo de Hegar (ablandamiento del útero istmo), y la pigmentación de linea alba – Linea nigra, (oscurecimiento de la piel en una línea media del abdomen, causada por hiperpigmentación como resultado de cambios hormonales, por lo general aparecen alrededor de la mitad del embarazo). Sensibilidad en los senos es común durante el primer trimestre, y es más común en las mujeres que están embarazadas a una edad màs joven.

La detección del embarazo se puede lograr usando una o más pruebas de embarazo diferentes, que detectan hormonas generadas por la placenta recién formada. Las pruebas clínicas de sangre y orina pueden detectar el embarazo 12 días después de la implantación. Los análisis de sangre durante el embarazo son más precisas que las pruebas de orina. Pruebas de embarazo caseras son pruebas de orina, y normalmente no pueden detectar un embarazo hasta por lo menos 12 a 15 días después de la fecundación. Un análisis de sangre puede determinar en medida cuantitativa aproximadamente la fecha en que el embrión fue concebido.

A pesar de todas las señales, algunas mujeres no se dan cuenta de que están embarazadas hasta que son bastante lejos a lo largo del embarazo. En algunos casos, algunas mujeres no han sido conscientes de su embarazo hasta que empiezan su trabajo de parto. Esto puede ser causado por muchos factores, incluidos los períodos irregulares (muy común en los adolescentes), ciertos medicamentos (no relacionados con concebir hijos), y las mujeres obesas que no hacen caso a su aumento de peso. Otros pueden estar en la negación de su situación.

Una de las primeras ecografía obstétrica puede determinar la edad del embarazo con bastante precisión. En la práctica, los médicos suelen expresar la edad de un embarazo (es decir, una “edad” de un embrión) en términos de “fecha menstrual”, basada en el primer día del último período menstrual de la mujer, como la mujer que lo reporta. A menos que una mujer con una actividad sexual reciente que ha sido limitada, ha estado haciendo un seguimiento de sus ciclos, o la concepción es el resultado de algún tipo de tratamiento de fertilidad (como la IIU o FIV), la fecha exacta de la fertilización es desconocida. Sin síntomas como náuseas del embarazo, a menudo el único signo visible de un embarazo es una interrupción de la normalidad de la menstruación cíclica de la mujer, (es decir, un “período tardío”). Por lo tanto, la “fecha menstrual” es simplemente una estimación común para la edad de un feto, que es un promedio de 2 semanas después del primer día del último período menstrual de la mujer. El término “fecha de concepción”, a veces se puede utilizar cuando dicha fecha sea más segura, aunque incluso los médicos pueden ser imprecisas con el uso de los dos términos distintos. La fecha de vencimiento se puede calcular usando la regla de Naegele. La fecha prevista del parto también puede calcularse a partir de la medición ecografica del feto. Este método es ligeramente más preciso que los métodos basados ​​en la FUM. Otras técnicas de diagnóstico obstétricas puede estimar la salud y la presencia o ausencia de enfermedades congénitas en una etapa temprana.

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